Un paseo por la Almería burguesa
De una pequeña ciudad provincial a una ciudad próspera
La capital de Almería conserva la huella burguesa de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. La influencia de una clase social emergente que hizo florecer el comercio y la economía, transformando la ciudad. Los gustos las necesidades y el capital de la burguesía almeriense dotaron a la ciudad de un nuevo trazado urbanístico, donde los palacios salpican las plazas del casco histórico. En uno de esos, en la antigua Plaza Bálmez, vivió el poeta Federico García Lorca.
Un poco de historia…
Almería pasó a ser una pequeña ciudad provincial a ser una ciudad próspera, gracias al capitalismo comercial creado por la minería y también por la agricultura, más concretamente por el comercio de la uva, que se cultivaba en la baja Alpujarra. Ciertas familias se enriquecieron creando la clase social de la Burguesía. Esto provocó un cambio en el ocio, buscando otras formas de pasarlo bien y además enriquecerse culturalmente. Consecuencia de ello son el Teatro Apolo, el Teatro Cervantes, el Casino Cultural y el círculo mercantil. También en sus casas contaban con grandes salones para sus celebraciones, fiestas privadas y bailes. El pasado burgués se muestra en la arquitectura, las costumbres e incluso la gastronomía. Más allá de la capital, en Gádor encontramos uno de los puntos más importantes del origen de esta riqueza, las minas de azufre.
Y después de esta breve introducción, os dejamos un recorrido muy interesante que podéis hacer si queréis conocer parte de esta historia de la Almería burguesa, apreciando los detalles que la caracterizan. ¡Allá vamos!
Antiguo Casino Cultural
Declarado Bien de Interés Cultural desde 1985. Anteriormente fue una vivienda palaciega construida en el año 1888. En ella vivió D.Emilio Pérez Ibáñez, un hombre importante e influyente en Almería y político conservador. Es un buen reflejo de la sociedad de la época. Cuenta, entre otros, con un Salón Árabe y un impresionante salón de baile con estilo clasicista francés.
Paseo de Almería
Conserva interesantes edificaciones de la época burguesa. Merece la pena detenerse en los detalles de algunas de las fachadas. Destacamos la del edificio Banesto, también conocido como la Casa de los Rodríguez, construido en 1906. Y siguiendo por el paseo está la casa Montoya, también conocida como la casa Vasca o Casa de Doña Pakyta, que es un ejemplo de arquitectura regionalista española de los años veinte ahora convertida en Museo.
Casa Puga
Merece la pena destacar esta taberna de 1870, siendo una de las tabernas más antiguas de Andalucía, que fue posada y bodega. En sus paredes continúa la misma decoración que la que tenía a finales del siglo XIX.
Teatro Cervantes
Fue inaugurado en 1921, época de movimiento modernista reflejado en la búsqueda de la naturaleza. En el teatro podemos apreciar esto, por ejemplo, en las lámparas que imitan la forma de hojas y flores.
Casa de las Mariposas
Situada en Puerta Purchena, el centro neurálgico de la ciudad. Es un edificio histórico, catalogado como Bien de Interés Cultural, conocida como Casa Rapallo-Campos, por sus propietarios. Es un ejemplo de arquitectura burguesa y urbana en el que destacan sus elementos modernistas, como comentábamos antes con el Teatro Cervantes, las mariposas del castillete en su azotea son elementos representativos de este movimiento moderno enfocado a la naturaleza. Desde su parte más alta se ve una de las panorámicas más bonitas de la capital.
Te invitamos a conocer la historia del vaso de la cúpula aquí.
Hotel Catedral
Edificio señorial de 1850 que forma parte de la historia la Almería burguesa. Fue propiedad residencial de una familia perteneciente a la burguesía almeriense del siglo XIX. Aunque está rehabilitado conserva muchos elementos originales; como las puertas de entrada, los arcos, el tiro de escaleras o un arco de piedra.