La antigua estación de Almería, una de las más bonitas de España

La antigua estación de tren de Almería es una de las estaciones más bonitas de España. Ya no se utiliza y está sustituida por el edificio que se encuentra justo al lado, un moderno contenedor de hormigón. Sin embargo, esta nueva estación no puede superar en belleza a la centenaria estructura que resiste ante viento y marea.

La antigua estación de Almería abrió sus puertas en el año 1893. Desde entonces y durante 100 años, el edificio vio como familiares y amigos se despedían y reencontraban entre lágrimas de emoción o tristeza. Fue en 2005 cuando se abrieron otras puertas, las de la nueva terminal del edificio anexo.

Laurent Farge se encargó de la construcción

La emblemática estación se empezó a construir en el año 1890 con el proyecto del ingeniero jefe de la compañía Fives-Lille, Laurent Farge. Esta obra la ordenó la Compañía de los Caminos de Hierro del Sur de España, que se encargó de las líneas Linares-Almería y Moreda-Granada. Estas líneas se crearon con el objetivo de transportar el hierro de las minas granadinas al puerto.

Esta estación se hace con tintes modernistas y lo más característico de la arquitectura industrial del siglo XIX. Además, incluye detalles eléctricos y mudéjares de ladrillo a la vista. El hierro, el cristal y la piedra representan el edificio y lo hacen singular y comparable con las estaciones de Atocha de Madrid, la del Norte en Valencia o la de Francia en Barcelona.

Ataque de Hitler a la antigua estación

En mayo de 1937, concretamente el día 31, la estación fue atacada durante la Guerra Civil. Fue un bombardeo nazi el que perjudicó a la estación con daños en la vidriera central, la balaustrada de hierro del techo del edificio y el reloj de Paul Garnier. Este bombardeo fue propiciado por Hitler en reacción a la muerte de 31 alemanes a bordo del crucero Deutschland por el ataque de aviones republicanos en Ibiza.

En 1988, unos trabajos de reforma de la estación descubrieron la entrada a dos galerías del refugio creado durante la guerra. Fueron diseñadas por el arquitecto Guillermo Langle y son visitables parcialmente en la actualidad. 

Pero esta antigua estación se ha sustituido con la construcción de una nueva. Se debe a la necesidad de adaptar las vetustas líneas ferroviarias a la alta velocidad. Ahora se busca facilitar el intercambio de pasajeros de una ciudad a otra para no dejar a nuestra esquinada provincia sin contacto con el resto del país.

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