Un almeriense en Berghain, la discoteca más exclusiva del mundo
Conoce los secretos de uno de los templos mundiales de la música Techno
Para los que no lo sabéis, Berlín es la capital de la música Techno desde la década de los 90 donde un viejo edificio se convierte en discoteca. Como dicen todos los que la han visitado, es un lugar done conocerás gente de todo tipo de clases y de todas las edades, el lugar perfecto para pasar unos días donde seguro que vivirás experiencias inolvidables.
Pues así ha sido el viaje que han decidido hacer a Alemania cuatro amigos, un almeriense, un valenciano, un murciano y un colombiano.
El joven almeriense Francisco Rodríguez, de 24 años, técnico administrativo y que actualmente trabaja en el sector de la hostelería. Su pasión es la música Techno, hasta ahí todo normal, pero lo que él no sabía es que sería uno de los pocos almerienses en entrar en la discoteca con mayor misterio en la actualidad.
Por eso en Almería Is Different hemos querido conocer cómo ha sido su experiencia y sobre todo, que nos cuente los secretos que se ocultan tras esa famosa fachada.
Martes de ruta y discoteca:
Como a todos, a veces nos gusta coger un avión y desconectar del trabajo, de la rutina o simplemente para disfrutar el placer de viajar.
Lo primero y más aconsejable es conocer un poco la ciudad, los lugares más simbólicos, monumentos, pasear por las calles… “Llegamos a Berlín e hicimos un “freetour”, me encantó visitar La Puerta de Brandeburgo, Alexanderplatz, El Muro de Berlín o el Monumento al Holocausto”.
Un miércoles de sensaciones:
Después de visitar y conocer más profundamente la historia de Berlín, aprovecharon para hacer un viaje y conocer Campo de Concentración Sachsenhausen, nos cuenta Fran.
“hacía mucho frío y el lugar te hacía sentir mucho respeto por todos los horrores que sucedieron en ese lugar, tenía ganas de que acabara la visita, sentía agobio de estar allí”.
“Después nos fuimos a disfrutar de la gastronomía alemana a un bar de la zona donde nos comimos el filete típico de Alemania y una especie de albóndiga, estaba buena, aunque nada que ver con la comida de la tierra”, cuenta en almeriense.
Noche en la discoteca KitKat Club
- Precio de la entrada: 10 €
- Precio de la cerveza: 4,50 €
- Precio de las copas: 8 €
- Horario: 23:00 – 9:00
El KitKat Club es famoso por ser uno de los locales más liberales de Berlín.
Ambientado como un bar burlesque de los años 30, como en la clásica película Cabaret, es conocido por sus fiestas “sexualmente desinhibidas”, música Techno y Trance en Europa.
Según Fran, “la gente iba con poca ropa, pero no desnuda. El estilo era moderno y la gente de todo tipo, de todas las edades. Me gustó que el ambiente fuera respetuoso y que no hubiera ninguna pelea”.
Jueves de resaca:
Después de una noche con más de 11 horas de fiesta, “me acosté a las nueve de la mañana y me levanté a las dos de la tarde, sí que va a ser verdad que los españoles damos el cante allá donde vayamos”, era la hora de recuperar fuerzas y preparase para la gran noche en la discoteca Berghain, relata Francisco.
Jueves y viernes en la discoteca Berghain:
- Precio de la entrada: 10 €
- Precio de la copa: 7 €
- Precio de la cerveza: 3,50 €
La discoteca Berghain fue inaugurada en 2004, “tras reconstruir” una vieja central eléctrica en la que podemos escuchar los sonidos más característicos e influyentes del momento.
Pero, por lo que también destaca esta discoteca, es por su exclusividad y política de privacidad, «me miraron de arriba a abajo durante unos cinco minutos y luego me hicieron preguntas en inglés», “nada más entrar a la discoteca te ponen una pegatina en el teléfono para que no puedas hacer fotos o vídeos, está totalmente prohibido”, asegura Fran.
Sin duda, es uno de los clubes más difíciles para conseguir entrar. El club también se hizo especialmente conocido desde que rechazó la entrada a Paris Hilton.
El joven almeriense fue decidido y consiguió entrar en el local, “me decían que a los españoles no les dejaban entrar, era todo mentira”, asegura Francisco.
“Me puse un pantalón negro, camiseta de manga corta negra y capucha, chaquetón gris oscuro, tenis negros, calcetines negros, …. todo negro” nos cuenta entre risas Fran.
En el interior de la discoteca Berghain:
Dentro del recinto, el diseño interior minimalista. Arriba hay una sala adicional, el Bar Panorama. Tampoco sería raro encontrarnos con situaciones subidas de tono, “había camas para dar rienda suelta a tu imaginación, pasillos oscuros, sillones, celdas, los baños, con las puertas rotas, se podía fumar dentro, cerraban las persianas de la
sala cuando era de día y cada media hora la abrían, solo poco, para que entren los rayos del sol, todo esto con mucho humo y una luz muy tenue o nula”.
Una gran noche y un gran viaje que, sin duda, a muchos de nosotros seguro que nos ha entrado el gusanillo de ver todo esto con nuestros propios ojos.
De todas formas, podemos ir practicando e intentar pasar el filtro de la seguridad de la discoteca en éste juego de simulación, donde podrás incluso responder a las preguntas de los famosos porteros de Berghain.
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