Arte, poesía y sostenibilidad, la ambición cultural de la morisca y recoleta Almócita
Este municipio es ideal para hacer una escapada rural y huir de las concentraciones
A 54 km de la capital de Almería hallamos el municipio de Almócita, un pequeño pueblo cuyo nombre procede del legado árabe que sus tierras encierran. Con una altitud de 834 metros, esta localidad aún representa en las calles su pasado histórico, hallando la arquitectura morisca mejor conservada de la provincia. La historia árabe pervive mediante la conservación de la Judería en el Barrio Bajo.
Estas calles se convierten precisamente en las protagonistas de algunos proyectos artísticos y sostenibles que pretenden embellecer las mismas, llenano de vida a este pueblo de apenas 200 habitantes.
Noche de los candiles
Desde el año 2011 esta noche se ha convertido ya en una tradición. Una iniciativa celebrada a principios del mes de mayo que se enmarcó durante su primera edición en la Semana Europea de la Energía; de ahí su interés por mostrarse como un proyecto que apuesta por el desarrollo sostenible.
Cada año (cuando las pandemias lo permiten) se profundiza aún más en la cultura ecológica. Durante el evento las luces de las farolas son sustituidas por los viejos candiles de los vecinos, pasando la noche a la luz del fuego mientras la luna acompaña. Casas y fachadas son vestidas de antorchas naturales y barriles hoguera recubiertos de piedra natural.
La fría noche se siente cada vez más cálida, mientras las calles se alumbran con el fuego vivaz. Una escena que parece haber sido sacada de una película de otra época. La noche es acompañada con una espectacular propuesta artística que embauca las calles de Almócita. Actos llenos de tradición y simbolismo que aportan una magia especial a esta noche.
Junto a la balsa de “Las Espeñuelas” se encuentra el candil más grande del mundo, según el Guinness World Record. Está hecho de acero, con una capacidad para 652 litros.
Rincones hechos poesía
El casco urbano de arquitectura morisca mejor conservado de la provincia de Almería se encuentra en Almócita. Presenta un trazado estrecho, serpenteante con casas de fachada blanca y escalonadas, y calles empedradas. Calles fáciles de perderse uno, pero en las que podremos hallar poesía en estado vivo. Cualquiera se inspira en ellas, en sus geranios y jazmínes, en sus fuentes y monumentos. Veamos uno de ellos.
VERSO
El verso: el órgano del poema
Abrir la lengua como el ábside de decir: decir.
No poner palabras sobre qué: el poema
Más bien por qué el poema.
La música comprime la sangre
la música no es consciencia; es consciencia invocada.
esta música (la sangre)
es una invocación
de no saber pronunciar
como en el poema:
el poema, como la música,
es para los que no entendemos las palabras.
escribir sobre esto aquí,
nos hace tan lejos.
Una vez inventamos un gesto
para el instante
Y lo miramos y nos supimos insuficientes.
Cómo intenta explicarte un color.
Almudena Vega
Para desconectar
Si deseas hacer una escapada para recorrer los rincones de este municipio y huir de las concentraciones tienes a un paso del pueblo el Camping de Almócita, enclavado en la alpujarra almeriense. Un lugar tranquilo para alejarte del asfalto y disfrutar del turismo rural. Dispone de Bar – Restaurante, módulos de aseo, servicios de lavandería, actividades multiaventura, wifi gratis y alquiler de vehículos, entre otros.
Además de visitar los versos o el candil más grande del mundo, puedes acercarte a monumentos tan representativos como la Plaza de Almócita, la Fuente de los Tres Caños, el lavadero que ocupa un antiguo aljibe o el Barrio de la Judería.
