Descubre en ‘Costa de Almería’ la playa que hay en ti…
La diversidad del litoral almeriense ofrece al turista extensos arenales vírgenes, playas urbanas con los máximos servicios y calas paradisiacas
El paisaje recortado de las calas sobre el azul del cielo y la espuma del Mediterráneo dota a la provincia de un perfil singular y especialmente atractivos para turistas llegados desde todos los puntos del país y, también, del extranjero. El reclamo no puede ser mejor. Sol, arena, deporte, naturaleza y una gastronomía de cinco tenedores completan un intenso abanico de posibilidades a medida de cada uno de los visitantes, que tiene la posibilidad de encontrar la playa y la Almería que hay dentro de él.
El frente litoral de ‘Costa de Almería’ dibuja su caprichoso mapa de entrantes y salientes nada más abandonar la provincia de Granada o por su entrada desde Murcia, donde directamente abre las puertas la maravilla natural del Levante almeriense.
Parajes naturales
La zona de Poniente es el retiro dorado con el que sueñan los amantes de los deportes de viento. Una mezcla de sensaciones, salitre, brisa, espuma blanca sobre las olas y otras muchas opciones para los aventureros.
Esta ubicación cuenta, además, con un bonito Parque Natural en la zona de Punta Entinas Sabinar, donde junto a la fauna autóctona que los visitantes pueden contemplar mientras se desenvuelve en su hábitat, hay lugares de humedales que merece la pena plasmar a través de cualquier objetivo curioso.
Pasando por la capital, que abre sus posibilidades a las faldas de La Alcazaba, la eterna vigía que ha sido testigo de la historia y del paso de las civilizaciones. El Mediterráneo y la tradición árabe ha influido directamente en la gastronomía que ofrece la provincia considerada como ‘La huerta de Europa’. Hortalizas y verduras junto con pescado fresco en la costa y carne de matanza en el interior hacen las delicias de los visitantes más exigentes con paladares selectos. Es uno de los atractivos de la provincia: una gastronomía sabrosa, saludable y de calidad gracias a los productos que conforman la marca gourmet de la provincia ‘Sabores Almería’.
El levante almeriense y su mágico litoral
La posibilidad de pisar la arena blanca y fina de las playas de Levante es también otra razón de peso por la que los turistas seleccionan Almería como destino potencial de sus vacaciones. Hay pocas cosas comparables al fondo marino que se descubre en cada cala, al golpear rítmico del agua en las rocas y a la tranquilidad que acompaña a una zona que gana muchos enteros si está ubicada en las proximidades del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar.
Las de los municipios de Levante son de las pocas playas vírgenes que quedan en el continente europeo. Pequeñas calas donde esconderse, perdiéndose y desconectando del estrés y arenales inolvidables como por ejemplo la Playa de los Muertos en Carboneras, la del Castillo de Macenas en Mojácar, o la Playa de Cala Panizo, en Cuevas del Almanzora. Hay una gran cantidad de ellas en el mapa de la geografía almeriense.
Carboneras, Mojácar, Garrucha, Vera, Pulpí o el anteriormente mencionado Cuevas del Almanzora abren el abanico de posibilidades a los turistas o a los mismos residentes. Además, cada una de estas localidades cuenta con recursos turísticos que los convierten en únicos.
Hablando del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar también aparecen los recortes en el mar, esa maravilla natural de la que Almería es gran valedora. Las playas tienen también un peso fundamental aquí. Cala Rajá, Cala Carbón, Cala de la Media Luna, o Genoveses y Mónsul marcan un importante enclave donde la orografía es fundamental.
Mucho más que playa, Almería es cultura
No todo es playa en la provincia. Almería dispone de un amplio bagaje cultural forjado por las diferentes civilizaciones que la han poblado a lo largo de los siglos. Desde la prehistoria, con zonas arqueológicas como ‘Cortijo Nuevo’, en la capital, Los Millares en Santa Fe de Mondújar, El Argar en Antas, Abdera (Adra) o Villaricos en Cuevas del Almanzora, por poner algunos ejemplos. Aunque son muchos más en diferentes municipios como Dalías, Roquetas de Mar o Berja.
La ubicación de la provincia entre otras cosas cercana al mar, peligro potencial de ataques en la época, hace que en la misma proliferen fortificaciones defensivas. Algunas de ellas son el Conjunto Monumental de la Alcazaba en la capital, Murallas del Cerro de San Cristóbal, al lado del anteriormente mencionado, Castillo de Los Fajardo en Vélez Blanco (que celebra un mercado medieval muy reconocido debido al perfecto enclave que hace que la ambientación sea óptima) o el Castillo del Marqués de los Vélez en Cuevas del Almanzora.
También es Almería referente en arquitectura religiosa como es el caso del Santuario de la Virgen del Saliente en Albox, a cuya Romería acude un gran número de personas y se celebra en el mes de septiembre o la magnificencia de la Catedral Fortaleza de la capital, perlada en los laterales con el tradicional Sol de Portocarrero.
