Una vieja estación convertida en museo del libro y la palabra
En Serón, la ‘Estación de los Cuentos’, se ha convertido en visita obligada para niños y mayores
El lugar donde hoy dirigimos nuestros pasos es un claro ejemplo de cómo se puede dotar de vida cultural a edificios que ya cumplieron la misión para la que fueron construidos y que están destinados al abandono y la ruina. En nuestra provincia hay varios casos de los que ya nos lamentamos.
Afortunadamente, hace unos años, alguien pensó que una vieja estación abandonada, en la que ya no quedaban ni raíles por los que pudiera transitar un tren, podría convertirse en un espacio cultural, un referente en la provincia en materia de lectura.
Estación de los cuentos
Situada en la Vía Verde del Almanzora, en al municipio de Serón, se encuentra la ‘Estación de los Cuentos’, un espacio dedicado a los libros en general y a los cuentos en especial, creado y gestionado por un grupo de animación a la lectura “muy animado”: el grupo ‘Colorín Colorado’.
Este grupo de personas, después de recorrer la geografía nacional durante más de 25 años realizando actividades en bibliotecas, ferias del libro y encuentros literarios de pueblos, aldeas y ciudades, vio que la vieja estación de Serón se podía llenar de magia, la magia de los libros. Así nació esta estación tan particular que alberga un museo dedicado al libro, al cuento y a la palabra.
Una visita llena de magia
En esta estación los visitantes se lo pasan genial, tengan la edad que tengan. Así pueden “pasear entre el reino del papel y Cervantes, hacer senderismo en un bosque encantado, visitar la casa de la luna y ver libros gigantes, raros y curiosos llegados de todo el mundo.
La visita a este ‘museo tan ilustrado’ se puede realizar en familia, como visita escolar o como grupo de adultos, eso sí, reservando previamente al teléfono 608 26 94 14 o enviando un correo electrónico a la dirección colorincuentos@hotmail.com.
Y si después de tanto cuento queremos seguir conociendo más lugares de Serón, podemos aprovechar para recorrer el pueblo y entrar en su castillo, visitar el poblado minero de Las Menas o comprar un jamón en los distintos secaderos.