Como apasionado de mi tierra, Almería, me gustaría invitaros a conocerla desde otra vista, desde otra perspectiva, una mirada de Almería desde las alturas.
Me encanta la naturaleza y soy un aficionado a intentar capturar en fotos parte de su belleza y digo parte, porque todos los que disfrutamos de esta pasión, que es la fotografía de la naturaleza, sabemos que por mucho que la tecnología avance, nunca podemos captar todo lo que vivimos y sentimos al estar ahí.
La provincia almeriense tiene una luz muy diferente a todos los lugares que conozco, una luz que es conocida en todo el mundo y que nos regala cada día amaneceres, medios días, puestas de sol, en general todo lo que vemos son auténticos espectáculos naturales.
Un viaje para descubrir Almería desde las alturas
Los paisajes de nuestra tierra están llenos de contrastes y luces que, a mí, me encanta “pillar” desde esos lugares increíbles de la provincia.
Aquí compartiré con vosotros aquellos rincones que todos conocemos de Almería como calas, playas, bosques, campos, desierto y montañas, en definitiva, un viaje para redescubrir Almería de otra manera, desde otra vista, desde el aire.
Para empezar esta sección os traigo un amanecer desde la carretera del Cañarete, que es la carretera que une Almería con Aguadulce, para aquellos que no son de aquí o no la reconozcan.
Los que tienen la suerte de ver esto a diario saben bien lo que digo, pero os invito a todos que viváis en unos pocos segundos este amanecer.
Diario de un Atrapa Paisajes
7.17 AM
Hace frio, como siempre, y me pregunto:
¿Qué puñetas hago yo aquí a estas horas, si no sé si ni siquiera podré grabar algo?
Ni miré el parte… me dejé llevar por la intuición.
Salgo del coche sin muchas ganas, porque hoy, en nuestra Almería desde las alturas, esos ocho grados son cuchillos, pero aquí estoy… siempre pasa igual y nunca te arrepientes del madrugón.
Tengo que montar rápido el equipo porque el sol no te espera.
Parece que hace bueno …quizá tenga suerte y se vea salir el sol por Cabo de Gata, aquí estamos, vamos a volar.
De repente, mientras termino de montar el equipo, el sol parece hacerme un guiño de aviso con los primeros chispazos de luz más intensa.
Comienza a brillar sobre la típica bruma matutina que hay por el Cabo, es como si me esperase, ¡wow! qué momento…
Despego, elijo rumbo hacia esa luz y ¡zas! …. tengo el privilegio de vivir un amanecer de esos que no olvidas. el privilegio de ver Almería desde las alturas.
Os prometo que ni miro el mando, ni controles, ni nada …no hay tiempo, solo me dejo llevar y lentamente vuelo sabiendo que estoy grabando algo increíble.
Voy tomando altura, alejándome de las montañas y metiéndome en ese mar que aún está bailando entre la luz y la sombra del amanecer.
Sin duda alguna, mereció la pena como siempre.
Tengo la compañía de alguna cabra montesa de esas que todos vemos cuando vamos por la carretera que parece mirarme y decir: disfrútalo.
No hay segundas oportunidades ni plan B, lo que se grabe es lo que hay.
Me recreo volando con las primeras luces sobre el mar y enseguida empiezas a notar el calor y la luz subiendo… es hora de recoger y empezar el día, pero así …uno empieza distinto cuando ve Almería desde las alturas, os lo prometo.
Aquí tenéis el resultado de aquella mañana fría en el espejo del mar que, sino conocéis, ahora podréis descubrir de forma diferente.
Que los disfrutéis tanto como yo hacerlos.