El estrés es uno de los graves problemas del momento y es que, aunque en Almería exista una gran calidad de vida y el buen clima nos acompañe casi todos los días, el tiempo no todo lo cura. Así que, nos guste o no, los almerienses también nos estresamos.
¿Qué ocurre con el estrés? Pues que, entre otras cosas, puede provocarnos problemas dermatológicos. De hecho, Pilar Gómez Avivar, dermatóloga de la clínica Dermal, asegura que ante la preocupante situación que llevamos viviendo desde hace un año a causa de la pandemia las patologías en sus pacientes se han visto aumentadas.
‘Mascné’, el principal problema del estrés
El principal problema que la doctora se encuentra en su consulta es el ‘Mascné’, término que se refiere al acné que produce el uso de la mascarilla. La utilización durante mucho tiempo de este accesorio, que ya se ha convertido en nuestro más inseparable complemento, provoca una humedad que tapona nuestras glándulas faciales, lo que desencadena la aparición de granos. Ante esta situación, se recomienda el lavado de cara con un gel facial por la mañana y por la noche, evitando exfoliar en exceso para no dañar el manto hidrolipídico de la piel. También es importante tras la limpieza es uso de una crema hidratante más ligera de lo habitual.
En ocasiones, no se sabe que tipo de crema se ha de utilizar. Para ello, existe la posibilidad de realizarse un estudio para conocer que tipo de piel se tiene. En el caso de tenerla grasa, no se puede utilizar una que hidrate mucho porque puede provocar una mayor obstrucción de la glándula creando así más acné, mientras que una piel más seca sí que necesita mucha hidratación.
Calvas, dermatitis, soriasis y sufrimiento de uñas
Por otro lado, Gómez Avivar, está notando un aumento en la caída del cabello con calvas en el cuero cabelludo o en la barba. He incluso ha percibido que de la situación de estrés la gente se tira del cabello.
Los brotes de dermatitis; como la seborreica en la cara con eccemas, enrojecimiento y descamación o la atópica en el cuerpo, cuando la piel es más seca y más sensible de lo normal, es otro de los problemas que más se está presentando entre los almerienses.
Otra de las protagonistas es la soriasis, y es que a pesar de ser una enfermedad genética, ésta se desarrolla con factores estresantes.
Las uñas también están sufriendo. La causa de ello se asocia al excesivo uso del gel hidroalcohólico, al abundante lavado de manos, o simplemente al tic de comértelas por los nervios.
Control de lunares
La dermatóloga también ha apreciado que, además del estrés, esta situación a causa de la pandemia provoca, al tener más tiempo libre, que uno se explore y observe más. Está recibiendo en la clínica pacientes que han percibido un cambio en sus lunares, o incluso, que han percibido alguno nuevo. A pesar de que recomienda acudir a un profesional en el momento en el que uno tenga algún síntoma de los mencionados anteriormente, hace un especial llamamiento al control de los lunares. Se debe prestar especial atención a la regla de los lunares ‘A, b, c ,d, e’, que se refiere a lo siguiente:
- A: No asimétrico.
- B: Bordes regulares.
- C: Color homogéneo
- D: Diámetro uniforme
- E: Evolución sin sangrado, enrojecimiento o picor
Un ‘boom’ en retoques estéticos
Sin embargo, no solo es un momento en el que se presta más atención a problemas de salud, sino, también estéticos. La doctora ha notado un ‘boom’ de los retoques estéticos, los que más se están realizando en estos momentos son aquellos en los que se eliminan las arrugas del tercio superior de la cara o los surcos nasogenianos. Ambas correcciones se efectúan con ácido hialurónico. Dos cambios con los que los clientes quieren eliminar el aspecto de cansado de sus caras y conseguir así, sentirse mejor.