Disfrutar del otoño en el mar de Almería

¿Quién dijo que sólo se puede ir a la playa en verano?

Comienza el colegio, el verano se va y se acaban las vacaciones. La mayor parte de los turistas nos dejan. Se descongestionan las playas y las calas. Se suman dos fenómenos extraordinarios, el veranillo del membrillo y la tranquilidad a nuestras costas. Llegan los mejores días para que los almerienses podamos disfrutar del otoño en el mar de Almería.

Sin tener que madrugar para coger sitio, sin escuchar las conversaciones o la música del de al lado, sin ese calor tan agobiante que te obliga a meterte en el agua cada cinco minutos,…¡los días perfectos empiezan justo al terminar el verano!

En ‘Almería is Different’ te recomendamos dos lugares de fácil acceso, con aguas cristalinas y muy interesantes para bucear.

Cala del Embarcadero

Se llama así porque este lugar era utilizado para cargar los barcos aprovechando el embarcadero natural que forman las rocas. Está en un lugar muy estratégico, ya que se encuentra entre paredes verticales de roca y queda resguardada del viento, rodeada de montañas. Además justo al lado, hay otra cala rocosa muy bonita, la Cala de Piedra Galera. Para llegar a la Cala del Embarcadero utiliza el camino que encuentras junto al hotel de Los Escullos, cerca de San José.

Es ideal para los amantes del snorkel. Hay praderas de posidonia, multitud de especies marinas, muchas estrellas de mar y a veces hay medusas de huevo frito, que son muy bonitas e inofensivas para el hombre. Es habitual ver bancos de peces grandes y pequeños, tantos hay que incluso con un poco de suerte podrás ver a algún pájaro buceador (o somormujo) pescando velozmente. Estos días son idóneos. Entre sombrilla y sombrilla puede haber metros de distancia, o tener la cala sola para ti. El otoño en el mar de Almería desde luego es más relajante que el verano.

Eso sí, hay que llevar escarpines porque hay muchas piedras y erizos. Por molestos que puedan parecerte, en realidad son un buen indicador de bajo nivel de contaminación. Pocas aguas verás tan transparentes y limpias como las de esta zona.

Cala del plomo

Esta alejada de cualquier núcleo urbano, lo que garantiza una calidad y limpieza del agua excepcional. Es pisar esta cala y ya se nota que es especial, porque mezcla arena dorada brillante con arena negra. Si buceas a la derecha de la cala encontrarás muchos peces, mini playitas, montones de ermitaños y hasta cuevas rodeadas de aguas turquesas. Llegarás hasta la Punta del Plomo, desde donde se ve también la Cala Puente. A la izquierda las formaciones rocosas fósiles son un poco diferentes y se forman piscinas muy curiosas.

Vista de la Cala Puente desde la Punta del Plomo

También puedes disfrutar del camino, a pesar de tener que ir despacio por ser de arena y estar lleno de piedras. Para llegar a la cala tendrás que atravesar la Rambla del Plomo, un pequeño oasis de vegetación con palmeras, cactus, chumberas, olivos y bancales, y hasta os cruzaréis con el Cortijo Fortificado construido entre los siglos XVII y XVIII para frenar el paso de los piratas que desembarcaban en la cala del plomo. La Cala del Plomo está ubicada entre los núcleos urbanos de Las Negras y Agua Aguamarga, concretamente entre la Cala de San Pedro y Cala Enmedio.

En realidad cualquier playa o cala que escojas, para disfrutar de estos últimos días de buen tiempo que se nos regalan, es un buen destino. El otoño en el mar de Almería está infravalorado, te invitamos a que lo descubras tú mismo. ¡Y un último consejo! Espera a que se vaya el sol, ahora los atardeceres son los más bonitos de todo el año con impresionantes cielos rojizos, anaranjados, rosas y púrpuras.

Salir de la versión móvil