Níjar, situado a los pies del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, es uno de los pueblos más bonitos de España. Este rincón andaluz destaca no solo por su belleza, sino también por su rica tradición artesanal, su historia y su entorno natural.
Casco histórico y artesanía
El casco histórico de Níjar, declarado Conjunto Histórico-Artístico, es un laberinto de calles empedradas que respiran historia. La iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación, del siglo XVI, es uno de sus principales atractivos arquitectónicos. En Níjar, la artesanía es una tradición viva. Sus famosas jarapas y cerámicas son un reflejo de la herencia cultural de la zona y pueden adquirirse en talleres y tiendas locales.
Rutas y turismo natural
Níjar es la puerta de entrada al Parque Natural de Cabo de Gata, un paraíso para los amantes del senderismo, el buceo y la fotografía. Desde aquí se pueden explorar calas como la de San Pedro o los Escullos, así como realizar rutas en bicicleta por el paisaje volcánico que caracteriza la zona.
Fiestas y tradiciones
Las fiestas de San Sebastián, patrón del municipio, se celebran en enero con procesiones y actividades culturales. En agosto, la Feria de Níjar llena el pueblo de música, bailes y gastronomía. Otro evento destacado es el Mercado Medieval, donde las calles se transforman en un escenario que rememora épocas pasadas.
Gastronomía
Níjar ofrece una cocina basada en productos de la tierra y el mar. Entre los platos más representativos se encuentran las migas, el gurullo con conejo y el trigo guisado. Los postres, como los soplillos y los roscos de vino, son una deliciosa muestra de la tradición repostera de la zona.
Níjar es un pueblo que combina la tranquilidad de sus calles con la energía de un entorno natural único, convirtiéndolo en una joya imprescindible de la provincia.