Bajo los pies de sus habitantes y cruzando de extremo a extremo la ciudad se halla este entramado de pasadizos que sirvió de cobijo a miles de almerienses durante la Guerra Civil española. Una colosal obra que, pese a los escasos medios del momento, se ha convertido en los refugios antiaéreos más grande de toda España y Europa. Con casi 4,5 km de recorrido los Refugios de la Guerra Civil de Almería conforman, así, la visita guiada con mayor recorrido de Europa.
A pesar de no ser frente de batalla, Almería fue sacudida por 52 bombardeos durante la contienda. Esto es lo que llevó al arquitecto municipal Guillero Langle a diseñar entre 1937 y 1939 esta red de Refugios antibombardeos. Una obra que podría salvar la vida de, al menos, 40.000 personas. Para ello contó con la ayuda del ingeniero de minas Carlos Fernández Celaya y el ingeniero de caminos José Fornieles.
Los Refugios, que cayeron en el olvido al acabar la guerra, volvieron a dotarse de vida en el año 2001 cuando, por azar, fueron “descubiertos” al tratar de construir un parking en zonas próximas. Actualmente, y tras la recuperación que tuvo lugar entre 2001 y 2006, los Refugios de Almería constituyen una de las atracciones turísticas más demandadas de la ciudad.
Luz en la oscuridad
Durante la visita a los Refugios de Almería se pueden conocer tres espacios: un refugio privado, un quirófano improvisado y una alacena. El espacio médico no se construyó hasta 1938, tiempo después de que llegaran los supervivientes de la masacre de la carretera de Málaga.
Antiguamente, la entrada a los refugios se hacía a través de dos accesos: públicos y privados. Los públicos se ubicaban a pie de calle y, mediante escaleras, daban entradada a la oscuridad de las galerías. Mientras tanto, los privados pertenecían a casa adineradas, edificios públicos e, incluso, a diferentes parroquias de la ciudad. Algunos de sus propietarios, durante los ataques, dejaban las puertas de sus casas abiertas con un letrero que indicaba la existencia de refugios para, así, poder facilitar la entrada a toda la población posible.
Algunos visitantes califican la bajada de ‘imponente’. Cuando accedes, el olor a humedad te inunda y la oscuridad se hace con el espacio. Aunque cuenta con galerías de ventilación natural, la renovación de aire es casi imperceptible. La propia estructura de los Refugios de Almería obligaba a sus habitantes temporales a mantener cierto orden, pues algunos de los pasillos contaban con apenas 1 metro de anchura. A pesar de ello, el susto y el temor hacía que la gente corriera despavorida, produciendo caídas y aplastamientos.
Al ser un espacio de convivencia, existía un código de conducta que debía ser respetado. No se podía fumar. Ni llevar armas. Y menos hablar de política o religión, para evitar cualquier enfrentamiento en el interior.
Visitas guiadas
Podrás hacer tu visita turística a los Refugios de Almería acudiendo al centro ubicado en la Plaza Manuel Péreza García, 1, llamando al 950 268 696, enviando un correo a refugios@aytoalmeria.es o adquiriendo tus entradas a través de Internet. Las visitas son guiadas y es necesario adquirir las entradas con antelación online o en la taquilla de los Refugios (Playa Manuel Pérez García). Para hacerlo existen dos horarios.
- Horario de verano:
Lunes cerrado
Del 1 de Junio al 30 de Septiembre
Martes a domingo de 10:30 a 13:30 horas. Visitas guiadas a las 10:30 y a las 12:00
Viernes y sábados de 17:00 a 20:00 horas. Visitas guiadas a las 18:00 y a las 19:30
Del 1 de Agosto al 15 de de Septiembre se abrirá tambien los martes, miércoles y jueves en horario de 17:00 a 20:00 horas.
- Horario de invierno (octubre a mayo):
Lunes cerrado.
Martes a sábados de 10:30 a 13:30 horas y de 18:00 horas a 21:00 horas. Visitas guiadas a las 10:30 y a las 12:00. Tardes a las 17:00h y 18:30h.
Domingos de 10:30 a 13:30 horas. Visitas guiadas a las 10:30h y a las 12:00h.
Las dos visitas matinales de los miércoles están reservadas para visitas concertadas a través de los Programas Educativos Municipales, durante el curso académico.