La vida de un celiaco diagnosticado en Almería no es nada sencilla. Por un lado, tienen que llevar una dieta sin gluten para toda la vida, ya que es el único tratamiento que existe. Por otro, el precio encarecido en los supermercados de todos estos productos, que son una necesidad básica para los que la padecen, les supone un agravado coste cuando van a comprar.
Nuestra sociedad carece de información sobre la enfermedad y de la existencia de la contaminación cruzada. Es por esto, que se hace complicado llevar una vida aparentemente normal.
La contaminación cruzada es el peor enemigo
La contaminación cruzada es uno de los factores que más altera la vida de esta personas. Las salidas a un bar se convierten en un autentico reto. Si un restaurante tiene unas ensaladas preparadas y al lado de ellas, se está utilizando harina de trigo, estas ensaladas se contaminarán, siendo un verdadero peligro para la salud de un celiaco en Almería.
No se puede tostar pan sin gluten en una tostadora donde previamente se ha puesto pan normal. También está prohibido utilizar los mismo utensilios de cocina.
Ofrecen formaciones durante el año
Desde la Asociación Celiacos Almería (ASPECEAL) se intenta concienciar sobre la celiaquía a todos los colectivos implicados en la misma. Comunicar su propósito a toda la provincia de Almería, para mejorar la calidad de vida de las personas celiacas y su integración social. Además, ofrecen formaciones a todo el personal de la hostelería, así como asistencia técnica en cocinas durante todo el año, para tener un control de la contaminación cruzada.
Actualmente se desconoce la cifra anual exacta de diagnosticados en nuestra provincia. Desde, ASPECEAL dicen que “afecta a unas 10.000 personas y solo el 25% está diagnosticado”.
Cabe destacar que solo el Ayuntamiento de Adra ofrece una ayuda bianual para realizar actividades de concienciación. Por otro lado, el Ayuntamiento de Almería les concede una sede en la plaza de mercado de las Regiones para realizarlas.
Los celiacos en Almería salen menos a los bares
Como decíamos al principio de este artículo, los almerienses y la sociedad en general no estamos concienciados sobre la celiaquía. Muchas veces, se piensa que por tener cerveza sin gluten y pan sin gluten en un bar ya es un sitio apto para celiacos y no es así.
Un celiaco en Almería no puede ir a un restaurante normal. Irá a aquellos que tengan convenio con la asociación de Celiacos o irán a bares donde se pueda ver la cocina a fin de evitar la contaminación cruzada. Es un hecho, que los que padecen esta enfermedad salen menos a comer fuera de casa, debido a la poca seguridad con la que se trata este tema.