La mayoría de los almerienses desconocen la existencia de las Canteras Califales, explotaciones situadas al norte de la capital, escondidas en el llamado Cerro de las Mellizas, en el popular barrio de La Chanca. Se trata de un conjunto de canteras que en la época medieval suministraron de piedra a las construcciones ordenadas por Abdal-Rahmán III. Sin ir más lejos, de estas canteras se extrajo el material necesario para construir La Alcazaba, el principal monumento de nuestra provincia.
La piedra calcarenita que enamoró a los constructores del monumento, las murallas de la ciudad y los torreones que existen en la zona, era húmeda y muy manejable, pero en 1147 la veta se acabó y las canteras fueron abandonadas. A pesar del tiempo transcurrido, el estado de conservación es perfecto, lo que permite a los expertos conocer más datos del trabajo en ellas y realizar un minucioso análisis de las técnicas utilizadas para la extracción de los sillares para la fortaleza y las murallas de Jairán.
Hace unos años, la Junta de Andalucía inscribió a las Canteras Califales de Almería en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz como Bien de Interés Cultural (BIC).
Visitas guiadas
La asociación ‘La Chanca-Pescadería a mucha honra’ organiza desde hace un tiempo una serie de rutas guiadas para que los almerienses puedan conocer este elemento del patrimonio histórico en primera persona.
La próxima será el próximo domingo 15 de septiembre y partirá desde el ancla de la Avenida del Mar. El recorrido pasa por la Cueva de las Palomas, el Barranco Caballar y la Joya, un excelente mirador de la Alcazaba y el puerto.
Para participar en esta visita sólo hay que inscribirse en las redes sociales de la asociación y aportar un euro a modo de donativo.
¿A qué te apetece sentirte Indiana Jones por un día y conocer estas Canteras Califales?
Fotos cedidas por la Asociación ‘La Chanca-Pescadería a mucha honra’ y firmada por sus autores.