Más de veinte años llevan sus miembros en la música bajo formaciones como At Least, El fin del mundo o Wi Bouz, entre otras. Esta es la trayectoria de ‘Adiós Caballos’, un cuarteto de hardcore progresivo de la escena musical almeriense, alabado por la crítica en todo el país.
La banda la forman Billy (voz), Tolo (guitarra) y Sifo (batería) y Lalo (bajo). Sus canciones sinceras están influenciadas por el post hardcore, el screamo europeo y el rock de los 90. Y con ellas, sacan de dentro todo lo que llevan con unas letras que retratan el alma. Actualmente tienen un Ep cuyos sonidos se mueven en la frontera entre la melancolía y la rabia sin medida, como un bocado que mezcla dulce y salado y se funde con nuestros sentidos. En Almería is Different hemos hablado con Billy, el vocalista de la banda, para conocerlos un poco más y saber cómo ven el futuro de la música en directo.
Diez años después de disolver el grupo ‘At Least’ volvisteis como ‘Adiós Caballos’. Después de la trayectoria del grupo anterior, ¿notáis vértigo? ¿responsabilidad?
La verdad es que nos apetecía mucho volver a tocar juntos. Estuvimos diez años juntos y diez separados, pero nunca pusimos un punto y final, ya sabes: “aquello de lo que no te despides siempre te persigue”.
Al no ganarnos la vida con esto, todo lo hacemos como y cuando nos da la gana, por eso que tiene más valor para nosotros, que cualquier otra cosa de las que hemos hecho en la vida.
¿Se podría decir que gran parte del sonido de ‘Adiós Caballos’ se lo debéis a ‘At Least’?
Creo que quizás no el sonido en sí, pero sí los matices… ‘At Least’ nos enseñó qué cosas se nos daban mejor y cuáles peor, y eso es un aprendizaje que le debemos. En este momento escuchamos muchas más cosas que entonces y somos bastante más abiertos, bebemos de muchos sitios, pero es dentro del ruido donde mejor nos sentimos.
¿Cómo planteáis el tema de las letras? ¿Los grupos ‘agresivos’ se libran de la lupa en la lírica? ¿Se esconden los sentimientos entre ruido o gritos?
Las letras tienen su importancia, a veces existen antes que la música y otras no. Siempre llevo una libreta en la que voy apuntando ideas y haciendo un poco de trabajo artesanal, disfruto tanto del proceso como del resultado.
Respecto a lo de la lírica creo que hay de todo, pero no solo pasa en los grupos gritones. Si pones los cuarenta o vas a cualquier festival Indie, el 80% de los grupos que suenan no tiene nada que decir. Vivimos en una sociedad hiperglobalizada donde todos somos copias de copias y repetimos a otros que también repiten, es una pena, pero es así.
Letras que salen de dentro
Por lo que se escucha en vuestro EP «Llora», las letras hablan de nostalgia, corazones rotos. ¿Todo experiencia personal o tenéis referencias externas?
Hay mucho de «penita» y tristeza en ellas, suelo utilizar la música para cerrar círculos, creo que es mi forma de despedirme de las personas y las cosas. Suelen estar influenciadas por el cine y la literatura, pero el punto de partida es un poquito de vivencia personal, así las hago mías para siempre.
“Aquello de lo que no te despides siempre te persigue”, letra extraída de una de vuestras canciones, ¿qué persigue a Adiós Caballos? ¿Y qué persigue el grupo?
Creo que todos perseguimos lo mismo, buscar un lugar en el que ser felices, disfrutar al máximo de compartir tiempo con gente a la que queremos y gente que nos quiere y todo eso es ‘Adiós Caballos’. Es nuestra forma de compartir y formar parte de algo que nos diferencia del resto.
Por vuestro estilo, ¿os sentís en tierra extraña en la escena musical o, por contra, os sentís cerca de muchos artistas?
Nos sentimos cerca y lejos, nos gustan mucho los extremos, pero luego nos gusta unir esos extremos. Nos encantan los grupos que no dan tregua y son una “ruidera” constante, pero también los que tienen melodías enormes. Por eso creo que inconscientemente tratamos de unir esas dos cosas.
Adaptarse a la situación
Os comparan con grupos como Viva Belgrado por vuestras similitudes, pero ¿qué os hace diferentes?
Creo que somos muy diferentes aunque tengamos nexos e influencias en común. Viva Belgrado son unos jefes, nos gusta mucho lo que hacen y como han sabido evolucionar su sonido, siempre que sacan algo estamos atentos.
Pero nosotros siempre hemos tenido un concepto mucho más pop de canción, muy de respetar estrofas y estribillos…
Acaba de llegar el otoño y es una época que a vosotros os ha inspirado para escribir, ¿este año ‘Llora otoño’ por la situación de la música en directo?
Lloramos nosotros al ver el panorama… Parece que no vayamos a volver a poder cantar y abrazarnos con nuestros amigos en un concierto en demasiado tiempo. Parece increíble, y también parece que no hay interés en adaptarse a la situación.
Por último, ¿cómo estáis enfrentando como grupo la actual situación que estamos viviendo? ¿Cuáles son vuestros planes de futuro?
Sacamos ‘Otoño’ nuestro próximo EP en breve, y la intención es ponernos a ensayar para sacar canciones nuevas y ver cuál es el formato final en el que decidimos mostrarlas.
